No te quiero…

Tan sólo me gustas, desde el momento que te vi en persona. Justo en el instante que levanté mi cabeza y estabas ahí, sonriendo, con la boca y la mirada.
Me gustas. Y mucho.
Me gustan tus ojos castaños y brillantes, relucientes de abrumadora felicidad.
Me gustan tus gestos, como levantas los hombros en señal de duda, o como pones la mano imitando a un paisano.


No te amo…

Me gustan tus manos, tocando al amor de tu vida o acariciándome a mí, porque sé que ambas las haces desde el corazón.
Me gustan tus piernas atléticas y formadas que me atrapan y no me dejan salir.
Me gustan tus brazos que me sustentan y acogen cuando no puedo dormir.
Me gusta tu barba, acariciarla, tocarla… te queda tan bien.


No te quiero ni te amo…

Me gustan tus lóbulos, besarlos, lamerlos…. Me gusta lo que haces cuando lo hago, me gusta verte así.
Me gusta la contagiosa alegría que veo en tus pupilas y en tus mejillas sonrojadas, porque son el reflejo de tu alma.
Me gusta tu pelo despeinado y para cualquier lado. Y la poca preocupación que te acarrea.


No te quiero ni te amo pero…

Me gusta como me hablas, me explicas o me intentas convencer.
Me gusta cuando te doy algo para que no se arrugue y me lo devuelves hecho una pasa.
Me gusta oírte hablar de ti, tus batallas, tus puestas o salidas de sol.
Me gustas cuando hablas así del amor por una mujer o el que le tienes a tus dos ojitos derechos.


No te quiero ni te amo pero sé que…

Me gusta perderme contigo entre las sábanas una tarde entera, o una noche y perder la noción del tiempo.
Me gusta tenerte encima mío hablando de la vida, del aquí y del allá.
Me gusta que faltes a trabajar por mí y me acompañes.
Me gusta que seas así. Simple y llano, sin grandes expectativas pero con grandes motivaciones, pasiones y anhelos.

No te quiero ni te amo pero sé que tarde o temprano…

Me gusta saber que te pones la camisa de tu abuelo solo por el amor que le tienes.
Me gusta que uses el perfume de la mujer que amas para así tenerla cerca, y poder olerla y sentirla.
Me gusta como piensas de la vida y del amor.
Me gusta lo bello que eres por fuera, pero más lo que eres por dentro. Tu esencia pura y transparente.


No te quiero ni te amo pero sé que tarde o temprano lo haré…

Me gustas. Sin más. No hay trasfondo ni lo puedo remediar.
Me gustas justo desde el instante que levanté mi cabeza y estabas ahí.
Sonriendo con la boca y la mirada.